Hoy no tengo ganas de escribir.

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Edgar Orellana.

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Hoy amanecí de malas, seguramente alguno se preguntará ¿ y yo que culpa tengo? pero amanecí sin ganas de escribir y quizá es mi culpa.

Hoy me levanté y vi a mi perrita " mimosa" viéndome de forma lastimera, se paseaba frente a mi con ínfulas de grandeza y traté de ignorarla pero llegó al colmo de mostrarme sus colmillos en una forma burlesca.

Seguramente mi mascota pensará que soy tonto porque estoy sentado en una silla mecedora, esperando una llamada que nunca llegará, ´no tengo teléfono; pero espero esa llamada con ansias.

Hoy amanecí de bajón y en el colmo de la pereza busqué algún correo interesante para publicarlo, encontré mensajes de feliz navidad y próspero año nuevo, pero enviados a 50 personas más, solo por cumplir.

En medio de esos mensajes absurdos encontré este, que al menos arrancó una sonrisa en mi:

San viernes divino, san viernes amado, cuida mi intestino el grueso y delgado.

Protege mi páncreas beba lo que beba, que no sea esta noche mi última peda.

Mi hígado encomiendo a tu Santa mano, y lo que estoy bebiendo lo orine sin daño.

Permite que no se nuble mi vista y que al bailar no me caiga en la pista.

Que al pagar la cuenta cuides mucho mi dinero, por que tengo unos amigos que no dan ni para el mesero.

Y al salir del bar., no me desampares por que si manejo me parto la madre.

Permíteme ver la luz al otro día, pero que no sea tirado en la esquina.

Líbrame del vómito diarrea y jaqueca, quítame la agrura y la boca reseca.

Dame el poder de hablarle a una nena, solo te pido que no sea fea.

Permíteme concentrar mi ruta y camino, porque luego no recuerdo ni donde me orino.

San viernes bendito… te invoco a mi lado para poder llegar a la peda del sábado.

¡Que así SEA!