(Tomado del diario El financiero)
Representantes de grupos sociales de Guatemala advirtieron hoy sobre los riesgos que implica el alto costo de la vida y de los alimentos básicos como resultado de la crisis económica mundial derivada de la imparable alza del petróleo.
El dirigente del Grupo de Apoyo Mutuo (GAM), Mario Polanco, dijo que "es peligrosa" para países pobres como Guatemala la "difícil situación mundial" marcada por los altos precios del crudo y la desaceleración de la economía de Estados Unidos.
Indicó que en Guatemala el impacto se refleja en el constante aumento del precio de la canasta y de servicios básicos como el transporte público y la energía eléctrica, lo cual agudiza la pobreza que afecta al 70 por ciento de la población (11.5 millones de habitantes).
El reconocido defensor de los derechos humanos descartó, sin embargo, "en el corto y mediano plazo, un estallido social" como consecuencia del alto costo de la vida, en especial de los alimentos básicos. "No lo veo tan cercano", dijo.
Estimó que "si se pueden esperar" protestas sociales. De sindicatos, organizaciones indígenas y campesinas, populares, estudiantiles, "para exigir al gobierno que haga algo para parar este problema de los altos precios de la canasta básica".
Las protestas "llevarían a una situación de ingobernabilidad", que se "sumará a los problemas de credibilidad que tiene el gobierno del presidente Alvaro Colom por ofrecer mucho y no cumplir".
El activista aseveró que de las expectativas que levantó el gobierno de Colom, que comenzó su labor el pasado 14 de enero, "ninguna se ha logrado, lo mismo que la falsa promesa de fijar precios tope o estables de la canasta básica".
Por su parte, una agrupación de organizaciones defensoras del derecho a la alimentación emitió una declaración pública en la que exige "acciones urgentes" ante la crisis alimentaria en puerta.
El grupo, integrado por el Centro Internacional para Investigaciones en Derechos Humanos, Coordinación de ONG y Cooperativas, Mesa Nacional Alimentaria y la Red Nacional para Defensa de la Seguridad Alimentaria, reiteró que el gobierno debe tomar "acciones urgentes" para el acceso a la alimentación.
Indicó que "la problemática alimentaria nacional se ha constituido en un tema que en los últimos meses llama la atención" en Guatemala, "en especial a raíz del incremento acelerado del costo de la canasta básica alimentaria".
Se pretende justificar esta situación "únicamente" a partir del aumento de los precios internacionales del petróleo, pero la realidad es que "es producto de más de una década de gobiernos neoliberales que han implementado políticas de apertura económica".
Añadió que estas políticas de apertura económica, a tono con la globalización que impera en el mundo, "han lacerado las posibilidades productivas de la población guatemalteca".
Sostuvo que "en un lapso de diez años, Guatemala pasa de ser un país autosuficiente en términos alimentarios a un país que depende de los movimientos de los precios internacionales de alimentos", que "se encuentran condicionados" por monopolios de empresas transnacionales.
Según la denuncia, las políticas de apertura comercial en Guatemala "además han significado que la producción de alimentos sea sustituida por megaproyectos agrícolas orientados a la exportación, en especial de producción de caña de azúcar y palma africana".
Los megaproyectos "tienen la característica que ocupan grandes extensiones de tierra, utilizan grandes cantidades de agua y, lo más grave, no requiere de la mano de obra campesina, lo que ha provocado la expulsión de miles de familias del campo".
Afirmó que la producción de alimentos "ha disminuido en forma considerable". En el período 1990-2005 la producción de frijol se redujo 25.9 por ciento, la de maíz 22.2 por ciento, la de trigo 80.4 por ciento y la de arroz en 22.7 por ciento.
En cambio, en el mismo periodo la producción de caña de azúcar se incrementó en 98.6 por ciento, de acuerdo con los datos que la agrupación atribuye a una entidad especializada de Naciones Unidas. "En la actualidad, más de la mitad de las personas desnutridas en Centroamérica son guatemaltecos, es decir tres millones de personas.
La mayoría son niños (49 por ciento de menores de cinco años) y campesinos (el 70 por ciento de la población indígena), indicó.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) advirtió en un reciente estudio que el alza de precios de los alimentos "aumentaría la pobreza e indigencia en más de diez millones de personas" en la región de Latinoamérica y el Caribe.
Puntualizó que "el alza intensa y persistente de los precios de los alimentos a nivel internacional está castigando con especial dureza a los sectores más pobres de América Latina" y "la pobreza y la indigencia aumentarán de no tomarse medidas urgentes para aminorar los efectos de estas alzas".
Citó proyecciones de indigencia y dijo que "se calcula que un incremento del 15 por ciento en el precio de los alimentos eleva la incidencia de indigencia en casi tres puntos, de 12.7 en 2007 a 15.9 por ciento en 2008".
"Ello implica que esa alteración de los precios provocaría que 15.7 millones más de latinoamericanos caigan en la indigencia", destacó la Cepal en su informe e insistió en que el incremento de los precios internacionales se ha acelerado en los últimos doce meses. (Con información de Notimex/MVC)
Representantes de grupos sociales de Guatemala advirtieron hoy sobre los riesgos que implica el alto costo de la vida y de los alimentos básicos como resultado de la crisis económica mundial derivada de la imparable alza del petróleo.
El dirigente del Grupo de Apoyo Mutuo (GAM), Mario Polanco, dijo que "es peligrosa" para países pobres como Guatemala la "difícil situación mundial" marcada por los altos precios del crudo y la desaceleración de la economía de Estados Unidos.
Indicó que en Guatemala el impacto se refleja en el constante aumento del precio de la canasta y de servicios básicos como el transporte público y la energía eléctrica, lo cual agudiza la pobreza que afecta al 70 por ciento de la población (11.5 millones de habitantes).
El reconocido defensor de los derechos humanos descartó, sin embargo, "en el corto y mediano plazo, un estallido social" como consecuencia del alto costo de la vida, en especial de los alimentos básicos. "No lo veo tan cercano", dijo.
Estimó que "si se pueden esperar" protestas sociales. De sindicatos, organizaciones indígenas y campesinas, populares, estudiantiles, "para exigir al gobierno que haga algo para parar este problema de los altos precios de la canasta básica".
Las protestas "llevarían a una situación de ingobernabilidad", que se "sumará a los problemas de credibilidad que tiene el gobierno del presidente Alvaro Colom por ofrecer mucho y no cumplir".
El activista aseveró que de las expectativas que levantó el gobierno de Colom, que comenzó su labor el pasado 14 de enero, "ninguna se ha logrado, lo mismo que la falsa promesa de fijar precios tope o estables de la canasta básica".
Por su parte, una agrupación de organizaciones defensoras del derecho a la alimentación emitió una declaración pública en la que exige "acciones urgentes" ante la crisis alimentaria en puerta.
El grupo, integrado por el Centro Internacional para Investigaciones en Derechos Humanos, Coordinación de ONG y Cooperativas, Mesa Nacional Alimentaria y la Red Nacional para Defensa de la Seguridad Alimentaria, reiteró que el gobierno debe tomar "acciones urgentes" para el acceso a la alimentación.
Indicó que "la problemática alimentaria nacional se ha constituido en un tema que en los últimos meses llama la atención" en Guatemala, "en especial a raíz del incremento acelerado del costo de la canasta básica alimentaria".
Se pretende justificar esta situación "únicamente" a partir del aumento de los precios internacionales del petróleo, pero la realidad es que "es producto de más de una década de gobiernos neoliberales que han implementado políticas de apertura económica".
Añadió que estas políticas de apertura económica, a tono con la globalización que impera en el mundo, "han lacerado las posibilidades productivas de la población guatemalteca".
Sostuvo que "en un lapso de diez años, Guatemala pasa de ser un país autosuficiente en términos alimentarios a un país que depende de los movimientos de los precios internacionales de alimentos", que "se encuentran condicionados" por monopolios de empresas transnacionales.
Según la denuncia, las políticas de apertura comercial en Guatemala "además han significado que la producción de alimentos sea sustituida por megaproyectos agrícolas orientados a la exportación, en especial de producción de caña de azúcar y palma africana".
Los megaproyectos "tienen la característica que ocupan grandes extensiones de tierra, utilizan grandes cantidades de agua y, lo más grave, no requiere de la mano de obra campesina, lo que ha provocado la expulsión de miles de familias del campo".
Afirmó que la producción de alimentos "ha disminuido en forma considerable". En el período 1990-2005 la producción de frijol se redujo 25.9 por ciento, la de maíz 22.2 por ciento, la de trigo 80.4 por ciento y la de arroz en 22.7 por ciento.
En cambio, en el mismo periodo la producción de caña de azúcar se incrementó en 98.6 por ciento, de acuerdo con los datos que la agrupación atribuye a una entidad especializada de Naciones Unidas. "En la actualidad, más de la mitad de las personas desnutridas en Centroamérica son guatemaltecos, es decir tres millones de personas.
La mayoría son niños (49 por ciento de menores de cinco años) y campesinos (el 70 por ciento de la población indígena), indicó.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) advirtió en un reciente estudio que el alza de precios de los alimentos "aumentaría la pobreza e indigencia en más de diez millones de personas" en la región de Latinoamérica y el Caribe.
Puntualizó que "el alza intensa y persistente de los precios de los alimentos a nivel internacional está castigando con especial dureza a los sectores más pobres de América Latina" y "la pobreza y la indigencia aumentarán de no tomarse medidas urgentes para aminorar los efectos de estas alzas".
Citó proyecciones de indigencia y dijo que "se calcula que un incremento del 15 por ciento en el precio de los alimentos eleva la incidencia de indigencia en casi tres puntos, de 12.7 en 2007 a 15.9 por ciento en 2008".
"Ello implica que esa alteración de los precios provocaría que 15.7 millones más de latinoamericanos caigan en la indigencia", destacó la Cepal en su informe e insistió en que el incremento de los precios internacionales se ha acelerado en los últimos doce meses. (Con información de Notimex/MVC)
1 Comentarios:
Don Mario Polanco y las ONG´s donde se mueven, en vez de estar haciendo esos comentarios tan debiles, deberia estar llamando a la población a levantarse contra la clases empresarial.
es lamentable que los "izquierdistas" desclasados y acomodados les resulta mas facil atacar a la administracion pública -lo que queda- que a la clase dominante es tiempo de levantarnos es tiempo de crear alternativas de poder para organizar a las masas empobresidas, hay que atacar al empresariado que sigue manteniendo sus privilegios y los altos inidices de ganancia en detrimento de los intereses de la gente que somos alfinal los que le llenamos de dinero las bolsas para mantener su estilo de vida, el derroche, el consumismo, y muchos privilegios , comodidades ;ojo que tambien los ONGeros se estan acomodando y ahora hablan deincidencia y no de transformaciones asi que no nos demos paja lo que necesitamos es un instrumento politico que transforme el Estado, para apostarle a una economia nacional, y para mantener a raya a los empresarios quienes no estan dispuestos a disminuir sus indices de ganancia , no pagan impuestos, y la tierra no se puede tocar, es tiempo de llamar al levantamiento revolucionario en contra de las clases dominantes y todos los lumpen que le cuidan y protegen.
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