Por: Natalia Kravtsov
María Eugenia Dengo, galardonada con el Premio Magón 2007, ganó prestigio en la enseñanza, con mucho estudio y trabajo. Durante su vida ha ocupado todos los escaños de la enseñanza pública. Fue maestra de primaria, profesora de secundaria y decana en la Universidad de Costa Rica. Allí obtuvo maestría en Administración de la Educación Superior y doctorado en Educación.
Además, ejerció el cargo de ministra de Educación Pública en el gobierno de Rodrigo Carazo, y sus libros son referencia obligatoria en las disciplinas educativas del país, tanto en las universidades estatales como en las privadas. Se desempeñó en la docencia hasta su jubilación en 1983, pero nunca se desligó de la Universidad de Costa Rica, donde estudia y colabora activamente.
El poeta Laureano Albán, miembro del Jurado, comentó: “Costa Rica no sería lo que es si no fuese por la educación que tenemos, y de la cual otros países carecen. Por eso, a través de la señora Dengo queremos homenajear a todos los educadores que trabajan en la formación de los valores costarricenses”.
Dengo no se olvidó de los sectores más desafortunados cuando estuvo al frente del Ministerio de Educación, pues desarrolló una reforma integral que culminó en la descentralización del sistema educativo. Además, implementó un programa en Talamanca para la enseñanza del bribri a los niños indígenas de esa zona.
“Realmente me siento abrumada, nunca aspiré a este reconocimiento, siempre he trabajado en educación con amor, entrega y dedicación. Es un homenaje no solo para mí sino para todos los educadores de este país”, comentó muy emocionada doña María Eugenia Dengo al describir su sentir como ganadora de tan preciado reconocimiento.
Este premio reconoce la labor de toda su vida, destacando los aportes en el área de la educación, “Para ser educador se tiene que tener vocación, hay que trabajar con amor, entrega y cariño, esa es la clave del éxito”, dijo la ganadora, como motivación a todos los educadores del país.
Además, ejerció el cargo de ministra de Educación Pública en el gobierno de Rodrigo Carazo, y sus libros son referencia obligatoria en las disciplinas educativas del país, tanto en las universidades estatales como en las privadas. Se desempeñó en la docencia hasta su jubilación en 1983, pero nunca se desligó de la Universidad de Costa Rica, donde estudia y colabora activamente.
El poeta Laureano Albán, miembro del Jurado, comentó: “Costa Rica no sería lo que es si no fuese por la educación que tenemos, y de la cual otros países carecen. Por eso, a través de la señora Dengo queremos homenajear a todos los educadores que trabajan en la formación de los valores costarricenses”.
Dengo no se olvidó de los sectores más desafortunados cuando estuvo al frente del Ministerio de Educación, pues desarrolló una reforma integral que culminó en la descentralización del sistema educativo. Además, implementó un programa en Talamanca para la enseñanza del bribri a los niños indígenas de esa zona.
“Realmente me siento abrumada, nunca aspiré a este reconocimiento, siempre he trabajado en educación con amor, entrega y dedicación. Es un homenaje no solo para mí sino para todos los educadores de este país”, comentó muy emocionada doña María Eugenia Dengo al describir su sentir como ganadora de tan preciado reconocimiento.
Este premio reconoce la labor de toda su vida, destacando los aportes en el área de la educación, “Para ser educador se tiene que tener vocación, hay que trabajar con amor, entrega y cariño, esa es la clave del éxito”, dijo la ganadora, como motivación a todos los educadores del país.
1 Comentarios:
Estimada Naty:
Me parece quq la Señora María Eugenia Dengo es digana de imitación. Como quisiera que nuestra Señora Ministra se comunicara con ella para ver como mejorar este País. Bueno, eso si Jodiel le da permiso.
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