25 de enero de 2008

Hipócritas.





Por: Edgar Orellana
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.A veces solo lo pensamos y no nos atrevemos a expresarlo.
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En este mundo cada día se aprende más, entrega todo y te verás recompensado con ingratitud y si es posible hasta una patada recibirás como si fueras un perro sarnoso.
¿Cuánto tienes, cuanto vales?

Bien aplicado en este mundo de hipócritas, falsos, ruines, mientras les sirves eres todo, pero cuando tu estrella empieza a declinar eres solo un estorbo.
Vilmente utilizados y cuando empiezas a ver la luz al final del túnel vuelven los amigos y los que nunca te han olvidado, pero no estaban en tus momentos de pesar.

En la miseria se necesitan los amigos, en la riqueza que se vayan al diablo, porque cuando empiezas a tener, surgen como hormigas por todos lados, pero cuando dejas de tener desaparecen como por arte de magia.

“« ¿Por qué –se le preguntó a Diógenes- la gente da dinero a los mendigos y no a los filósofos?» «Porque –repuso- piensan que, algún día, pueden llegar a ser inválidos o ciegos, pero filósofos, jamás.»”

Ayer tenía tantos temas que abordar, pero decidí dejarlos para la otra semana , igual me pasaron el correo de alguien que me podía dar información sobre una nota explosiva, resultó que ese alguien me debe dinero y nunca me dará la información que requiero, no me debe 10 centavos; aunque al que debe se le olvida y al que le deben no duerme pensando en cobrar.

Estoy realizando investigaciones serias que en Guatemala son un verdadero atentado, pero eso si, ya dejé un listado de quienes me detestan o me odian para que sean los primeros en ser investigados por aquello de “si me pego un balazo” o si se ven afectados con lo que aquí escriba.

La profesión del periodista es compleja, las únicas satisfacciones que nos llevamos son quedar a tono con la verdad, he saboreado como los funcionarios me invitan cuando les conviene, a sus mesas llenas de manjares y también he sentido cuando me cierran las puertas en la cara, porque no les conviene que un periodista metido se inmiscuya.

Hoy quería escribir tantas cosas, de situaciones que se están dando y al final el tiempo se me acortó.

Pero eso si, queda mucho trecho por delante y voy a recorrerlo con la verdad en la mano, a gritar lo que siento y veo en el accionar de muchos hipócritas, falsos, ruines y además traidores. No se donde escuché esto pero lo transcribo aquí: “No insulten mi inteligencia.”

No faltará quien diga, es un resentido; pero no importa, desde el momento que me sigue leyendo algo le debe llamar la atención.

Hoy no estoy de bajón, sencillamente estoy decepcionado de algunos seres humanos que no se quitan la careta y muestran piel de oveja, mientras esconden la verdadera de lobo, a estos farsantes voy a desenmascarar, solo espero tener los pelos en la mano para decir; esta mula es parda.
Mientras eso sucede voy a seguir adentrándome en la lectura de lo que en el futuro serán comentarios publicados en Megachapines.


"Viendo Diógenes en cierta ocasión cómo los sacerdotes custodios del templo conducían a uno que había robado una vasija perteneciente al tesoro del templo, comentó: «Los ladrones grandes llevan preso al pequeño.»”

2 Comentarios:

Anónimo dijo...

Estimado Edgar: Me parece que está bien que aborrezcamos el delito, y mejor aún me parece que delatemos a los culpables, pero, ¡cuidado!. No debemos odiar, es decir, ni tener malos sentimientos contra nadie (porque envenenan nuestra alma) ni buscar el castigo del culpable como una venganza personal, sino lograr que se haga justicia.
"Pues conocemos al que dijo: Mía es la venganza, yo daré el pago, dice el Señor.
Hebreos 10:30

Anónimo dijo...

Algunas veces las personas llegan a nuestras vidas y rápidamente nos damos cuenta de que ésto pasa por que debe ser así para servir un propósito, para enseñar una lección, para descubrir quienes somos en realidad, para enseñarnos lo que deseamos alcanzar.

Tú no sabes quienes son estas personas, pero cuando fijas tus ojos en ellos sabes y comprendes que ellos afectarán tu vida de una manera profunda.

Algunas veces te pasan cosas que parecen horribles, dolorosas e injustas, pero en realización entiendes que sin que superar estas cosas nunca hubieras realizado tu potencial, tu fuerza, o el poder de tu corazón.

Nada sucede por casualidad o por la suerte.

Enfermedades, heridas, el amor, momentos perdidos de grandeza o de pura tonterías, todo ocurre para probar los límites de tu alma.

Sin estas pequeñas pruebas la vida sería como una carretera recién pavimentada, suave, lisa. Una carretera directa sin rumbo a ningún lugar, plana cómoda y segura, mas empañada y sin razón.

La gente que conoces afectan tu vida, las caídas y los triunfos que tú experimentas crean la persona que eres. Aún se puede aprender de las malas experiencias. Es más, quizás serán las más significativas en nuestras vidas.

Si alguien te hiere, te traiciona o rompe tu corazón le das gracias porque te ha enseñado la importancia de perdonar, de la confianza y a tener más cuidado de a quien le abres tu corazón.

Si alguien te ama, ámalos tú, no porque ellos te aman sino porque te han enseñado a amar y a abrir tu corazón y tus ojos a las cosas pequeñas de la vida. Haz que cada día cuente y aprecia cada momento además de aprender de todo lo que puedas aprender, porque quizás más adelante no tengas la oportunidad de aprender lo que tienes que aprender de este momento.

Entabla una conversación con gente que no hayas dialogado nunca y actualmente escúchalos y presta atención. Permítete enamorarte, liberarte y poner tu vista en un lugar bien alto.

Mantén tu cabeza en alto porque tienes todo el derecho de hacerlo.

Repítete a ti mismo que eres un individuo magnífico y ¡créelo!, si no crees en ti mismo nadie mas lo hará.

Crea tu propia vida encuéntrala y disfrútala.

Desconozco su autor